
Hoy día, cuando la sociedad está más convencida de la importancia sobre el desarrollo sostenible y la necesidad de preservar el medio ambiente, el sector gastronómico se une para promover la inclusión social y fomentar la solidaridad a través de sus propuestas que van más allá de un menú de sabores y recetas exquisitas.
Gastronomía Social
Cada vez más, los comensales nos preocupamos por lo que comemos. Queremos conocer de dónde provienen los alimentos, cómo se desarrolla la cadena alimenticia, saber si lo que consumimos es producto del esfuerzo y del trabajo agrícola, cómo se disponen los alimentos que no se consumen, y muchos otros elementos que hoy se congregan en un concepto denominado gastronomía social, una corriente culinaria que se enfoca en utilizar la comida como un elemento muy importante para el cambio social que promueve la inclusión de la sociedad y la eliminación del desperdicio, dando así un gran valor a la diversidad cultural y a la sostenibilidad de los recursos ambientales.
Si bien para muchos es un placer acudir a un restaurante y disfrutar de la experiencia que nos ofrece, los chefs juegan un papel clave en la implementación de la gastronomía social. Son ellos quienes conocen a la perfección los ciclos de vida de cada producto, cómo se cultivan, pescan y crían, así como apreciar el valor de los ingredientes, el impacto que tienen sobre el medio ambiente y la influencia que obtienen las nuevas experiencias culinarias en la cultura.
Ejemplos de Gastronomía Social
La gastronomía social es un testimonio de cómo la comida puede servir como puente entre personas de diferentes orígenes y condiciones. En el mundo se han creado proyectos inspiradores que utilizan la comida como una fuerza para lograr el cambio social. A continuación, les damos algunos ejemplos:
La Brigada de Cocina: En España, la Brigada de Cocina es un proyecto que trabaja con personas con riesgo de exclusión social, ofreciéndoles capacitación en cocina y oportunidades de empleo en el sector gastronómico. Esta iniciativa no solo les proporciona habilidades culinarias, sino también constituye una fuente de ingresos y les brinda una sensación de pertenencia.
Refettorio Gastromotiva, Brasil: Gastromotiva es una organización brasileña que lucha contra el desperdicio de alimentos y la malnutrición. Han creado un comedor comunitario en Río de Janeiro donde chefs de renombre cocinan comidas gourmet utilizando ingredientes que de otro modo se desperdiciarían. Este proyecto une a chefs, a voluntarios y en general a personas en situación de vulnerabilidad en torno a una mesa compartida.
Food for Soul, Italia: La chef italiana Massimo Bottura fundó Food for Soul, una organización que transforma alimentos excedentes en comidas nutritivas para personas necesitadas. Su proyecto más conocido es el Refettorio Ambrosiano en Milán, que ha atraído a chefs estrella de todo el mundo que cocinan para aquellos que lo necesitan.
Mercados Solidarios, México: En México, se han establecido mercados solidarios que venden productos locales y frescos a precios asequibles en comunidades marginadas. Esto no solo ayuda a combatir la pobreza alimentaria, sino que también apoya a los agricultores locales y promueve la alimentación saludable.
Sobanukirwa, Ruanda: En Ruanda, el proyecto Sobanukirwa ofrece formación en cocina y emprendimiento a jóvenes en riesgo de exclusión social. Les enseña a cocinar platos tradicionales y modernos, al tiempo que les brinda la oportunidad de iniciar sus propios negocios de catering.